Fuente: LinkedInAtención: esto sucedió la semana pasada
Atención; la cosa está así: una vez más, nos presentamos por invitación a un concurso con un Organismo Público español . Sólo invitaron a tres empresas.
Pues bien: la empresa que se ha llevado el concurso (y que se ha llevado los últimos) ha ofertado el ruso, ucraniano o griego a 0,02 céntimos de euro la palabra. Esto significa que el ¿traductor? ruso trabaja por 0,015 céntimos. El de inglés o francés igual pone dinero.
He manifestado mi protesta porque considero que las condiciones económicas entran en lo que podríamos considerar una oferta temeraria; pero no ha servido de nada.
Así estamos. Es bueno que se sepa.
Servidora, que lleva casi 20 años dedicada a la traducción y además domina la mecanografía suele traducir entre 400 y 600 palabras por hora, sin contar la revisión posterior, que también requiere su tiempo, y siempre que no sea un tema que me exija investigar para documentarme o encontrar buenos glosarios o diccionarios especializados. Mi idioma de trabajo es el alemán, que en general requiere un "procesamiento" mayor que una traducción de un idioma latino, en la que el traductor generalmente no necesita darle muchas vueltas a la estructura de una frase, porque son lenguas de la misma familia lingüística. Pero el ruso y el ucraniano pertenecen a familias lingüísticas que nada tienen que ver con el castellano, y a no ser que el traductor sea un profesional experto y experimentado, dudo mucho que pueda traducir 400-600 palabras (que sean castellano y no cualquier cosa menos castellano), por lo que el sueldo se le queda en 5-6 euros por hora. ¡Gana más limpiando patios! Con lo cual, o bien se trata de calidad ínfima, o bien de explotación miserable, puede que una combinación de ambos.
¿Cuál era ese organismo público español? Confío en que no sea la policía, porque entonces entendería perfectamente por qué este país es jauja para las mafias rusas y ucranianas.
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